Amabirjiñen Arpea CT 1

Esta es la manifestación más septentrional de un conjunto de 6, casi tangentes unas de otras, todas ellas atípicas y en mi opinión, ejemplo de la evolución, que en estos montes tuvieron estos monumentos y sus constructores.
El proceso de la inhumación en dólmenes y túmulos, con la llegada de la incineración se trasladó a las mismas formas, pero reduciendo el tamaño tanto de cámaras como de galgales, con el resultado de túmulos en principio, con cámaras todavía de tamaño apreciable -como es en este caso- y evolucionando a cromlechs tumulares, con marcados peristalitos y cámaras de menor tamaño mas tarde.
En este caso, la cámara cerrada ocupa la parte mayor del peristalito.
Aunque no hemos podido consultar, ningún informe de excavación referente a estas manifestaciones, sabemos que Blas Taracena Aguirre excavó tres de estos monumentos, descubriendo cenizas y restos óseos calcinados en las correspondientes cámaras, por otra parte, otros autores los denuncian como dólmenes, sin embargo nosotros somos partidarios de encuadrarlos como cromlechs tumulares o túmulos de incineración, pues ninguno de ellos, ni los 4 cercanos de Gorostiko Lepoa o los mas alejados de Gorramakil, que mantienen las mismas formas, presentan un claro peristalito de testigos anclados en el terreno y mas bien están formados con losas horizontales inclinadas hacia dentro a modo de paredes, perfectamente redondas, que en su día sostendrían un túmulo de mas o menos altura, hoy desaparecido por la acción de saqueadores y excavaciones autorizadas o no.

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